Debo comenzar esta colección de «apuntes» mencionando que hasta las 18:30 pm de ayer estaba convencido de que H. sería la ganadora. Aún no cerraban las casillas en la costa oeste, y empezaban los chascarrillos tras el primer estado computado por completo (Kentucky).
A la par de las noticias, mi TL en Twitter se llenaba de diversas opiniones, memes y bromas de ocasión, a la muy mexicana manera de liberar la tensión. A lo que no le quité el ojo de encima fue a los tuits de Pepe Merino, politólogo y especialista en datos, que con la habilidad que lo caracteriza, era muy certero en sus apreciaciones. A las 18:57 decía:
Si entre Florida, North Carolina y Ohio al menos dos se van con Clinton… se pueden ir a dormir tranquilos. Ganó sin duda.
— José Merino (@PPmerino) 9 de noviembre de 2016
Es a las 21:12 cuando se asomaba la primera alerta:
Si…
Trump: FL, NC, OH, IO
Clinton: VA, MI, WI, COClinton necesita forzosamente NH o NV para ganar
— José Merino (@PPmerino) 9 de noviembre de 2016
Una hora más, aquello pasó a semáforo ámbar:
Ya se pueden preocupar en serio.
Detroit puede no alcanzar en MI; Madison puede no alcanzar en WI y Trump va arriba ahora en IA.— José Merino (@PPmerino) 9 de noviembre de 2016
45 minutos después, 23:06, el sonar de la primera trompeta:
Es complicadísimo que Clinton revierta con los votos de Milwaukee y Madison en Wisconsin.
Esto se acabó…— José Merino (@PPmerino) 9 de noviembre de 2016
El veredicto final, sólo para oficializar la «tragedia» llegó a la 1:29 am de hoy:
Wisconsin para Trump… listo, ya no hay espacio para incertidumbre: Trump ganó la elección.
— José Merino (@PPmerino) 9 de noviembre de 2016
Tragedia, sí (y con sus bemoles), pero ¿sorpresa?
Hace casi 4 meses, en un polémico artículo (como la mayoría de las cosas que salen de él), Michael Moore enumeraba «cinco razones por las que Trump va a ganar las elecciones«, comenzando su texto de contundente manera:
Siento ser el que dé las malas noticias, pero ya os lo advertí el pasado verano cuando dije que Donald Trump sería el candidato republicano a la presidencia. Y ahora traigo unas noticias aún peores y más deprimentes: Donald J. Trump va a ganar las elecciones en noviembre.
Las razones que enumera el cineasta y activista son:
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El Brexit del medio oeste de Estados Unidos
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El último bastión de los hombres blancos enfadados
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El problema de Hillary
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El voto deprimido a Bernie Sanders
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El efecto Jesse Ventura (irónico pero viable)
Así que…
Lo dijo M. Moore hace 4 meses.
Quien se sorprenda, es porque no lee a M. Moore. pic.twitter.com/0jOXernnoV— Víctor Esparza (@vicesparza) 9 de noviembre de 2016
Agregando mis 20 centavos a los «¿por qué gano Trump?» puedo mencionar 5 cosas:
I. USA es más que Washington, Nueva York, Los Angeles, Chicago, celebridades y demás mundillo cool de la música y el cine. Los colores no mienten:
The race to 270 is over. Here are the latest 2016 election results. https://t.co/Kir4tzdGWF pic.twitter.com/aLuJoGBQQF
— The New York Times (@nytimes) 9 de noviembre de 2016
II. El triunfo de Trump se viene gestando desde finales de los 80’s, cuando comenzó el éxodo de empresas gringas fuera de USA en busca de mano de obra barata para ampliar sus ganancias. Si se desea profundizar en esta opinión, viene a bien leer:
¿Por qué millones de trabajadores norteamericanos apoyan a Trump? Este análisis es clave para entenderlo https://t.co/4cxmTlgLQC
— Ignacio Escolar (@iescolar) 9 de noviembre de 2016
III. Vivimos en un mundo donde gobierna Rajoy, Maduro, Putin, EPN… Lo de Trump es una raya más al tigre. Más bien es necesario dejar de sobrevalorar a USA: sus habitantes son igual de susceptibles a la visceralidad, manipulación, y toma de decisiones poco racionales que el resto del mundo.
Vivimos en un mundo donde gobierna Rajoy, Maduro, Putin, EPN… Lo de Trump es una raya más al tigre, necesario dejar de sobrevalorar a USA.
— Víctor Esparza (@vicesparza) 9 de noviembre de 2016
IV. La ley del boomerang hizo lo suyo; todo lo que haces tarde que temprano te alcanza, con igual o mayor velocidad de cómo salió de ti, desde borrar miles de emails de cuenta personal utilizada irregularmente hasta autorizar bombardeos militares en pro de «la paz». Súmele además:
Condescendencia de Hillary y la arrogancia «cool» de Obama jugaron también. Hubiera sido diferente acercamiento a temas que Trump secuestró.
— aleksweb (@aleksweb) 9 de noviembre de 2016
y V. Esta pregunta es muy honesta:
Siendo 10 pm enumere 3 cosas x las q la probable elección d Trump representa una catástrofe para el mundo (no vinculadas a su personalidad):
— Víctor Esparza (@vicesparza) 9 de noviembre de 2016
¿Está todo (realmente) perdido? Por mencionar algo, el famoso y malévolo TPP: Trump se ha manifestado en su contra y que hará lo posible porque no avance -si es posible tal cosa-. Es esperado que tras décadas de un desmesurado expansionismo gringo, en vista del Make America Great Again las medidas que tome el futuro presidente contraigan y sacudan la posición que ocupa este país en el mundo entero, pero de ahí a que se concreten sus amenazas y promesas de campaña, hay trecho. Y no olvidemos que la administración de Obama -sí, el amado y carismático- ha sido la que más deportaciones ha realizado en décadas. Lo malo tampoco se cuenta, pero cuenta mucho.
Como conclusión -o comienzo de la Era Trump-, tras el Brexit, el NO en Colombia y estas elecciones, les paso una #IdeaMillonaria a las grandes editoriales:
«¿Cómo explicar el 2016?»,
un libro que diga.— Víctor Esparza (@vicesparza) 9 de noviembre de 2016
PD: Y nos queda como consuelo…
Al menos podremos presumirle a nuestros nietos (o whatever) que vivimos lo suficiente para ver cumplir las profecías de Back to The Future. https://t.co/HVTrxBIHVB
— Víctor Esparza (@vicesparza) 9 de noviembre de 2016