En una fecha que parecía no llegar, al fin este viernes se estrenó en México de manera comercial la fabulosa película Beasts of the Southern Wild (2012), torpemente titulada para nuestro país Una niña maravillosa. Lo de «fabulosa» pocas veces mencionado de tan atinada manera pues estamos ante la narración de una maravillosa fábula tan bien llevada a la pantalla por Benh Zeitlin (1982) en lo que es su primer largometraje.
La cinta, basada en la obra de un solo acto Juicy and Delicious de Lucy Alibar y adaptada para el cine por ella y Zeitlin, nos acerca a la vida de Hushpuppy (protagonista y narradora de la historia), pequeña de 5-6 años que vive con su padre en un barrio marginal de lo que suponemos Luisiana y el cual al verse azotado por una tormenta termina inundado, evocándonos inmediatamente la tragedia acontecida en la región tras el huracán Katrina.
Los detalles que anteceden a tal evento, el modo de sobrellevar el momento crtítico de la mismo por la pequeña, su refunfuñón y alcoholico padre y los vecinos del barrio, así como la manera de sobrevivir y empezar paulatinamente a reanudar la vida de la comunidad, alejada del asistencialismo gubernamental, son de magistral manera narrados audiovisualmente por Zeitlin, aprovechando el recurso de la imaginación infantil para transformar los hechos duros y crudos y presentarlos al espectador a través de los ojos de la protagonista como digeribles y no por ello faltos de emotividad o realismo. Basta escarbar en nuestros recuerdos infantiles para evocar la manera en la que terminábamos entendiendo tantas cosas de difícil comprensión para ponernos en lo zapatos de Hushpuppy y razonar, sufrir y llenarnos de esperanza junto con ella conforme se desarrollan los acontecimientos.
When it all goes quiet behind my eyes l see everything that made me flying around in invisible pieces. When l look too hard, it goes away. But when it all goes quiet, I see they are right here. l see that l’m a little piece of a big, big universe. And that makes things right». Hushpuppy.
Beasts of the Southern Wild fue exhibida por primera ocasión durante el Sundance Film Festival (enero 2012) y a lo largo del año y su aparición en 25 festivales se volvió acreedora a más de 50 premios y estar nominada en 4 categorías para la 85 entrega del Oscar: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Adaptado y Mejor Actriz (siendo Quvenzhané Wallis a sus 9 años la actriz más joven en la historia de estos premios en recibir una nominación), lo cual se traduce en una excepcional acogida tanto de la crítica como de la audiencia, y digna de ser considerada como una de esas cada vez menos afortunadas películas que tienen o tienen que verse.