Por encima de las predicciones que pueda hacer respecto a los posibles ganadores en la LXXXV entrega de los Oscar, prefiero hacer un compilado con mis 5 películas favoritas, aquellas que entre las 38 nominadas en 21 de las categorías (excluyendo las 3 donde se premian cortometrajes). La selección, teniendo presente que tuve oportunidad de ver alrededor del 90% de todas las candidatas (se me escaparon por decisión propia Brave y ParaNorman, así como el documental The Gatekeepers, no disponible en la red) y destacando del resto tanto por el conjunto de emociones que me produjeron como considerarlas de una muy merecida valía por la temática que abordan y lo bien logradas tanto en actuación como dirección. El orden es alfabético.
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BEASTS OF THE SOUTHERN WILD – Benh Zeitlin, 2012
Ya en días pasados compartí mi reseña sobre, sin lugar a dudas, la película sorpresa de la ceremonia al haber conseguido 3 de sus 4 nominaciones en categorías de las que podríamos considerar ‘mayores’: Mejor película, director y actriz. Si a ello le sumamos que Beasts of the Southern Wild es la opera prima de Zeitlin, la primera participación en cine para Quvenzhané Wallis (la entrañable Hushpuppy) y el presupuesto para su filmación no rebasó los 2 millones de dólares tenemos el guión perfecto para un cuento de hadas.
Una película agridulce, salida de lo convencional, y que consigue colocarnos en las sandalias de la protgonista para vivir con ella y desde la interpretación de su realidad las desventuras entre las que le tocó nacer y crecer, sumado a un fenómeno natural que termina desbordando (figurada y literalmente) su precaria situación, siembra al final un mensaje de esperanza que vale la pena no desperdiciar.
MOONRISE KINGDOM – Wes Anderson, 2012
Considerada una comedia dramática, este film de Wes Anderson (quien consiguió reconocimiento internacional con The Royal Tenenbaums, 2001) nos acerca a la difícil historia de amor entre Sam y Suzy, atípicos e incomprendidos adolescentes que, confiados en las habilidades scout del primero, deciden fugarse y emprendar la vida por cuenta propia, algo que pondrá de cabeza la dinámica de la pequeña comunidad en la que residen y corresponderá al Captain Sharp (interpretado con vehemencia por Bruce Willis) encabezar los esfuerzos para su búsqueda.
Moonrise Kingdom, a pesar de las buenas opiniones de la crítica y acogida ofrecida por la audiencia, sólo consiguió nominación en la categoría de Mejor guión original, autoría de Wes Anderson y Roman Coppola (hijo de Francis y hermano de Sofia, con quien colaboró como asistente de dirección en Lost in Translation), y quedando avasallada por lo monstruos de taquilla estrenados en diciembre. Ambientada en los 60s, consigue transmitir nostalgia por la época pero sobre todo ese cúmulo de emociones que en mayor o menor medida todos experimentamos en la adolescencia y nuestros primeros escarceos románticos. ¿Hasta dónde estás dispuesto a luchar por aquello que amas?
SEARCHING FOR SUGAR MAN – Malik Bendjelloul, 2012 (Suecia, Reino Unido)
Nominada a Mejor documental, de las 4 películas que pude ver en esta categoría fue la que me resultó más sorprendente en cuanto confieso no esperaba terminar tan prendido de ella, contagiado de lo que transmite y entusiasmado por la historia que narra: la búsqueda emprendida a finales de los 90s desde Ciudad del Cabo, Sudáfrica, de uno de los ídolos musicales de los 70s de aquella nación, Rodríguez, y del que no contaban con pista alguna y con que el varias generaciones de sudafricanos crecieron y convirtieron en símbolo de rebeldía.
Coleccionado una serie de entrevistas con los personaje involucrados en la búsqueda, músicos, productores, amigos, familiares y el mismo Sixto Rodríguez, amenizadas con las piezas musicales del cantautor, el resultado se vuelve un agradable y emotivo recorrido desde una taberna en Detroit a fines de los 60s hasta la sonrisa satisfecha del ídolo que no lo fue, y considerado por conocedores como más grandioso por la profundidad de sus letras que el mismo Bob Dylan. 86 minutos que desearás volver a repetir.
THE SESSIONS – Ben Lewin, 2012
Extraordinaria película, basada en la vida real, que nos acerca la historia del periodista y poeta estadounidense Mark O’Brien (1949-1999), afectado físicamente por la poliomielitis que le orilló a vivir asistido a un pulmón artificial, limitando sus actividades en exterior pero no su tremendo ímpetu creativo. Mas que volverse una biopic, Lewins se detiene en la exploración que inicia O’Brien en búsqueda de su satisfacción sexual y en la cual se encuentra con Cheryl Cohen-Greene, asistente sexual quien le brinda las sesiones correspondientes a una compañía terapéutica.
Cheryl es interpretada por una madura y guapísima Helen Hunt, consiguiendo la nominación como Mejor actriz de reparto, siendo la segunda nominación que recibe la californiana a un premio de La Academia, ya ganadora del Osca a mejor actriz en 1998 por su papel de Carol Connelly en As good as it gets. Destacada desde luego la magnífica actuación de John Hawkes como Mark y necesaria mencionar la participación de William Macy en el papel del padre Brendan, su consejero espiritual. The sessions consiguió 11 premios y 33 nominaciones en los diferentes festivales en los que participó, reflejo del éxito de su atrevida y singular propuesta. Por estrenarse en México el 29 de marzo.
REBELLE – Kim Nguyen, 2012 (Canadá)
Hablé ya de la también conocida como War Witch en mi reseña de las nominadas a Mejor película extranjera, y por la intensidad de lo que nos acerca es merecidísimo incluirla en esta minuciosa selección. Corre con la mala fortuna de competir contra Amour en su terna, de lo contrario la consideraría seria aspirante a llevarse la estatuilla.
Mediante el film, Kim Nguyen nos introduce en la vida de Komona, adolescente de 14 años y que está por dar a luz, siendo ella la narradora de los eventos desde 2 años antes y luego de ser tomada junto a muchos otros niños y jóvenes de la región como carne de cañón por la guerrilla local. Reconocida con el Jurado ecumémico del Berlinale 2012, Rebelle es, más que una película, un testimonial de la crudeza y crueldad que atosiga al continente africano y que a pesar de ellas siempre habrá brotes de alegría que permiten justificar el seguir con vida.