Memorias de un amante sarnoso, de Groucho Marx

Por recomendación de Javier Aranda, me di a la tarea de buscar el libro MEMORIAS DE UN AMANTE SARNOSO, obra de Groucho Marx, personaje del que, si bien conozco de su existencia por el indiscutible lugar que ocupa dentro de la actuación y humorismo nortemericano de la primera mitad del siglo XX, me considero profundamente ignorante.

En Memoirs Of A Mangy Lover (1963), Julius Henry -nombre real del actor- nos narra con cierta dosis de nostalgia pero abundante acidez e ironía, características de la producción artística de los Hermanos Marx, un repertorio de anécdotas e impresiones acerca de sus aventuras románticas. Desde aquella su «primera visión de un ignoto mundo de ensueños» a raiz de la visita a su hogar de su única tía, «mujer adinerada y de sugestivos encantos», hasta su hipótesis sobre cómo el hombre de las cavernas descubrió el placer del acto amatorio.

Hace ya muchos años, cuando era joven y célibe, me volvía loco por las chicas. Esto no constituye una rareza, especialmente en un muchacho señalado por el destino como maníaco sexual en potencia. La verdad es que, cuando a un hombre joven no le gustan las chicas, lo más probable es que algún psicoanalista acabe por decirle (después de cuatro años, a treinta y cinco dólares la sesión) que está enamorado de su padre o de su madre… o del vecino de enfrente.»

A pesar de consumir el libro en 3 tardes por lo digerible de su lectura, confieso me da la impresión de venir de más a menos y de muy irregular ritmo por la discimilitud de emoción o interés que despiertan los relatos, producto seguramente de un relajado trabajo editorial, del que desde luego no es culpable Groucho, para ese entonces bastante alejado de los reflectores y viviendo de la fama de sus años mozos. De interés, en tal caso, para profundizar en el conocimiento de este cuarteto de talentosos artistas.

De rouille et d’os, de Jacques Audiar

Al fin y luego de una larga espera como sucede con otras películas extranjeras (no USA) «no tan comerciales» (si cabe emplear el término), llega a las salas de cine de México: DE ROUILLE ET D’OS, conocida por su título en español como Metal y hueso. Sigue leyendo De rouille et d’os, de Jacques Audiar

Cartas a un joven novelista, de Mario Vargas Llosa

Revisando entre varios ebooks de los que se van acumulando para leer, me encontré CARTAS A UN JOVEN NOVELISTA (1997), del peruano Mario Vargas Llosa, laureado en 2010 con el Nobel de Literatura. Me bastaron cuatro tarde para finiquitar con él, considerándolo un imprescindible para quienes estamos involucrados en el mundo de las letras.

En Cartas a un joven novelista, como el título indica, Vargas Llosa establece conversación epistolar con un joven que, según relata en el primer capítulo, tuvo la valentía de escribirle solicitándole consejos sobre cómo convertirse en escritor. De tal modo que en cada apartado nos deleita con un ensayo sobre un tópico específico en el arte de la narración novelística, ilustrado tanto teórica como prácticamente con una variedad de ejemplos de obras y autores de reconocimiento mundial (James Joyce, Franz Kafka, Gustave Flaubert, Alejo Carpentier y Julio Cortázar, entre muchos más).

Así, al concluirla terminaremos empapados experiencialmente acerca del poder de persuación, estilo, el narrador y su ubicación espacio-temporal, nivel de la realidad, muda y salto cualitativo, la caja china, el dato escondido y los vasos comunicantes. Lo anterior, claro, de manera amena y muy digerible, y con la intención por despertar el apetito en el lector para conocer más sobre la teoría compartida, pero sobre todo, aprender a escribir leyendo.

La vocación literaria no es un pasatiempo, un deporte, un juego refinado que se practica en los ratos de ocio. Es una dedicación exclusiva y excluyente, una prioridad a la que nada puede anteponerse, una servidumbre libremente elegida que hace de sus víctimas (de sus dichosas victimas) unos esclavos.»

5 Broken Cameras, de Emad Burnat

Hace un par de semanas me propuse buscar y ver las películas nominadas en la categoría a Mejor Documental para la próxima entrega del Oscar en su LXXXV edición, encontrándome entre ellas con 5 Broken Cameras, que por su temática considero oportuno reseñar.

5 Broken Cameras (2011) es narrada completamente por el palestino Emad Burnat, codirector de la película junto al israelí Guy Davidi, y nos ofrece un compendio de las filmaciones que con videocámaras caseras ha hecho desde 2005 que adquirió la primera de ellas con motivo del nacimiento de Gibreel, su cuarto y último hijo. Lo peculiar es que Emad es residente de la población de Bil’in, colindante a la discutida frontera con Israel y en la que en los últimos años se han desarrollado cruentas batallas contra la ocupación israelí de tales terrenos, y mediante sus cámaras ha capturado los difíciles momentos que sus habitantes han sorteando en la incansable lucha palestina de resistencia civil.

five

El título lo recibe porque a lo largo de los años fueron 5 cámaras las que sucumbieron a los embates de las autoridades israelíes en diferentes escaramuzas, 2 de ellas salvándole la vida al amortiguar disparos dirigidos expresamente contra él. Es en 2009 cuando luego de conocer a Davidi comienza la selección del material y preparación de los guiones para el documental, contando en su recta final con la colaboración de la francesa Veronique La Goard-Segot para la edición. La historia desarrolla los eventos capturados por cada una de las cámaras, que como el mismo Emad señala, encierran etapas diferentes de su vida, en las que se fue incrementando tanto el compromiso como el riesgo de volverse periodista ciudadano, misión que no abandonó aún en los momentos de mayor apremio. A la vez resultamos testigos del crecimiento de Gibreel, y la pérdida de su inocencia al quedar atrapado en escenarios de violencia que ningún padre desearía para sus hijos.

Por tanto, mediante 5 Broken Cameras podemos conocer en primera persona los entretelones de un conflicto social que mantiene sobre él los reflectores de medios de comunicación de todo el mundo, pero con el valiosísimo matiz que se consigue al ser contado por alguien directamente afectado por él, anteponiendo su deseo de volverse portavoz de su pueblo al cuidado de su integridad física. No quiero dejar de largo la sana sorpresa que me provoca que se haya colado a la terna final de documentales nominados cuando es sabido que la comunidad judía mantiene fuerte influencia en la industria norteamericana hollywoodense. En contrapeso, vale mencionar, también se encuentra entre los 5 finalistas el documental The Gatekeepers (2012), que nos acerca la historia del Shin Bet, agencia de seguridad isaelí desde la voz de seis de su exintegrantes.

Sanar es un reto en la vida. Es la única obligación de la víctima. Sanar es resistir a la opresión. Pero cuando estoy herido una y otra vez me olvido de las heridas que controlan mi vida. Las heridas olvidadas nunca sanan, así que filmo para sanarlas.»

Y lo mejor de todo es que 5 Broken Cameras subtitulada en español está disponible en Youtube, subida por una comunidad de amigos de Vittorio Arrigoni (†), activista italiano asesinado en Gaza en 2011.

Beasts of the Southern Wild, de Benh Zeitlin

En una fecha que parecía no llegar, al fin este viernes se estrenó en México de manera comercial la fabulosa película Beasts of the Southern Wild (2012), torpemente titulada para nuestro país Una niña maravillosa. Lo de «fabulosa» pocas veces mencionado de tan atinada manera pues estamos ante la narración de una maravillosa fábula tan bien llevada a la pantalla por Benh Zeitlin (1982) en lo que es su primer largometraje.

La cinta, basada en la obra de un solo acto Juicy and Delicious de Lucy Alibar y adaptada para el cine por ella y Zeitlin, nos acerca a la vida de Hushpuppy (protagonista y narradora de la historia), pequeña de 5-6 años que vive con su padre en un barrio marginal de lo que suponemos Luisiana y el cual al verse azotado por una tormenta termina inundado, evocándonos inmediatamente la tragedia acontecida en la región tras el huracán Katrina.

Los detalles que anteceden a tal evento, el modo de sobrellevar el momento crtítico de la mismo por la pequeña, su refunfuñón y alcoholico padre y los vecinos del barrio, así como la manera de sobrevivir y empezar paulatinamente a reanudar la vida de la comunidad, alejada del asistencialismo gubernamental, son de magistral manera narrados audiovisualmente por Zeitlin, aprovechando el recurso de la imaginación infantil para transformar los hechos duros y crudos y presentarlos al espectador a través de los ojos de la protagonista como digeribles y no por ello faltos de emotividad o realismo. Basta escarbar en nuestros recuerdos infantiles para evocar la manera en la que terminábamos entendiendo tantas cosas de difícil comprensión para ponernos en lo zapatos de Hushpuppy y razonar, sufrir y llenarnos de esperanza junto con ella conforme se desarrollan los acontecimientos.

When it all goes quiet behind my eyes l see everything that made me flying around in invisible pieces. When l look too hard, it goes away. But when it all goes quiet, I see they are right here. l see that l’m a little piece of a big, big universe. And that makes things right». Hushpuppy.

Beasts of the Southern Wild fue exhibida por primera ocasión durante el Sundance Film Festival (enero 2012) y a lo largo del año y su aparición en 25 festivales se volvió acreedora a más de 50 premios y estar nominada en 4 categorías para la 85 entrega del Oscar: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Adaptado y Mejor Actriz (siendo Quvenzhané Wallis a sus 9 años la actriz más joven en la historia de estos premios en recibir una nominación), lo cual se traduce en una excepcional acogida tanto de la crítica como de la audiencia, y digna de ser considerada como una de esas cada vez menos afortunadas películas que tienen o tienen que verse.

Beasts of the Southern Wild